Carta de Desarrollo Comunitario:

 

 

            A estas alturas de curso echamos la mirada hacia atrás y coincidimos en pensar que la ASC está algo mal interpretada en la sociedad. Ambos pensábamos en la ASC como alternativa para intervenir en la sociedad.

 

            La ASC es un conjunto de estrategias para satisfacer las necesidades de los diferentes colectivos. Una vez pasado el primer curso es cuando nos damos cuenta de todas las funciones que un animador sociocultural puede desarrollar, sean de índole educativa, informativa, asistencial... con ganas de comenzar las prácticas del curso que viene y elegir la que nos llame más la atención. Comprobar si llegan nuestras recién adquiridas competencias con la realidad que presenta la ciudad de Burgos, con una sociedad cambiante y abierta que ha sabido reciclarse para el siglo XXI con una oferta cultural y social como nunca ha soñado. Es curioso cómo el sistema educativo pierde de vista, sin pretenderlo, perdido en una vorágine burocrática y sin acordar con las familias los valores sociales y culturales que quiere fomentar. Siendo nosotros los que contamos con la solución más plausible y los que tenemos que unir la labor educativa de familias y escuelas.

 

            Ha sido objeto de debate a lo largo del curso el nombre en sí, Animación Sociocultural, ya que para algunos de nosotros le falta algo de información, siendo más justa la denominación de Animación y Educación Sociocultural. Puestos ya a mejorar, creemos que a la parte teórica le falta una carga más de psicología, filosofía, sociología, así como algunas nociones más de informática. Está claro que nuestras competencias toman más sentido todavía cuando están unidas a las de nuestros compañeros de familia profesional, los integradores sociales y las asistentes sociosanitarios, amén de los educadores infantiles. Cuando trabajamos así, en equipos multidisciplinares, la intervención se vuelve mucho más efectiva y cubre la plétora de necesidades en las que intervienes.

 

            Es curioso cómo se confunden la animación con la labor de los monitores y coordinadores de tiempo libre. Que la administración no sea consecuente con las competencias que da a unos y a otros y se solapen esfuerzos y recursos, confundiendo sus funciones con las nuestras, es algo que habría que debatir y solucionar.